Un grupo de 16 opositores arrestados en noviembre pasado en Nicaragua mientras intentaban dar agua a nueve mujeres en huelga de hambre fueron excarcelados entre un grupo de 91 "presos políticos", la madrugada de este lunes de manera sorpresiva.
Entre los disidentes excarcelados se encuentra la estudiante de doble nacionalidad belga y nicaragüense Amaya Coppens, cuyo caso ha sido discutido en el Parlamento Europeo.
Los disidentes, autodenominados "la banda de los aguadores", fueron enviados a sus casas junto con otros opositores que llevaban meses o incluso más de un año en prisión, como el caso de Pedro Gutiérrez.
Una vez en su casa, Gutiérrez llamó al presidente Daniel Ortega y a su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, a "que busquen a Dios", que "sólo el diálogo" va a restablecer la paz, y que "necesitan explorar otro mecanismo para tratar al pueblo, no necesariamente la represión, el asedio, el encarcelamiento".
La excarcelación de los "presos políticos" fue confirmada por el Ministerio de Gobernación, grupos opositores y los propios reos.
"¡Salimos, lo logramos! Había gente de La Modelo y de otros centros penitenciarios, no estamos seguros quiénes, pero los 16 de 'El Chipote' vamos para nuestras casas, corran a recibir a sus familias. ¡Libertad para Nicaragua!", dijo Olga Valle, tras ser excarcelada.
La "banda de los aguadores" fue arrestada cuando intentaban donar agua a nueve mujeres que hacían huelga de hambre por la libertad de los "presos políticos", a quienes la Policía mantenía sitiadas en una parroquia para evitar ayuda humanitaria, luego de que el Gobierno cortó el suministro de energía y agua.
"A mí me detuvieron por apoyar al pueblo en la lucha que decisión que teníamos, el régimen que está ahorita en el poder está completamente cegado a lo que ellos quieren hacer y a lo que ellos dicen, por no tener los ideales de ellos, nos tenían secuestrados", dijo a EFE el disidente Francisco Jiménez.
Las razones de la excarcelación hasta ahora no han sido divulgadas por el Gobierno.
Aunque diversos grupos opositores mantienen campañas constantes en demanda de la liberación de los "presos políticos", la excarcelación de esta madrugada fue sorpresiva.
La Asociación de Familiares de Presos Políticos (AFPP) confirmó que la excarcelación se dio en parte a la intervención del nuncio apostólico en Nicaragua Waldemar Stanislaw Sommertag, y fue asistida por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), integrantes del Parlamento Europeo y diplomáticos de Estados Unidos, aplaudieron la excarcelación.
Hasta ayer la oposición contaba 148 "presos políticos" en las cárceles de Nicaragua, más otras 82 personas de las que no se tiene noticias desde que fueron capturadas por policías y paramilitares, aparte de 7 desaparecidas.
El Equipo de Monitoreo Azul y Blanco, el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), y la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, informaron que todavía permanecen encarcelados 65 "presos políticos".
"Seguimos en la lucha, no vamos a abandonar a las madres que aún no tienen a sus hijos", dijo la presidenta de la AFPP, Diana Lacayo, en una conferencia de prensa.
La CIDH, que señala al Gobierno de Daniel Ortega como responsable de la violencia, ha indicado que al menos 328 personas han muerto en el marco de la crisis que inició en abril de 2018. Organismos locales cuentan hasta 651. El Gobierno admite 200.
Ortega ha explicado que se defiende de un "golpe de Estado fallido". EFE
YS