La Embajada de Estados Unidos en Bagdad ha suspendido sus actividades consulares hasta nuevo aviso, después del asalto del martes contra sus instalaciones por parte de seguidores y miembros de la milicia Multitud Popular, integrada principalmente por chiíes.
"Debido a los ataques de milicias en el complejo de la Embajada de EE. UU., las operaciones públicas consulares están suspendidas hasta nuevo aviso. Todas las citas futuras están canceladas", anunció la legación diplomática en un breve aviso publicado a última hora del miércoles en su página web.
Así las cosas, llamó a los ciudadanos estadounidenses a que no se acerquen a las inmediaciones de la embajada y recordó que el consultado en Erbil, la capital de la región autónoma kurda, permanece abierto y funciona con normalidad para el procesamiento de visados y otros servicios consulares.
El pasado día 27, un ataque con más de 30 cohetes contra la base militar K1 de Kirkuk, en el norte de Irak, provocó la muerte de un contratista estadounidense y dejó varios heridos entre los militares de EE. UU. e Irak que se encontraban en las instalaciones.
El Pentágono considera que la milicia chií Kata'ib Hizbulá (KH) es responsable de los ataques que, desde mediados de octubre, tienen como objetivo bases militares e instalaciones gubernamentales donde se encuentra personal estadounidense que apoya al Ejército iraquí.
En respuesta a la primera víctima mortal norteamericana, el Pentágono informó el domingo de que Estados Unidos llevó a cabo "ataques defensivos" en Irak y Siria contra KH, que causaron la muerte de al menos 25 personas, de acuerdo con las milicias progubernamentales Multitud Popular, integradas principalmente por chiíes.
Cientos de simpatizantes y miembros de milicias chiíes reaccionaron al ataque y asaltaron la Embajada estadounidense en Bagdad dos días después de que Washington atacara posiciones de esas milicias.
EFE / EC