Upata.- La villa del Yocoima, la Upata antigua arriba a 259 años de fundada rodeada de verdes colinas y anclada en un valle que despierta encanto, Es notable recordar dentro de la historia que los Capuchinos Catalanes fundaron la villa de Upata el 7 de julio de 1762 Upata nació de acuerdo a los fundamentos jurídicos de las Leyes de Indias la fundación de villas en Venezuela no responde a un proyecto aislado ni es obra de la casualidad.
Estos pueblos quedaron sujetos a la necesidad de responder con mayor vigor al plan colonizador, el cual confrontaba las dificultades propias provenientes de la resistencia aborigen. Tampoco podemos decir que es un crédito únicamente de la corona; las villas, al igual que otras fundaciones en tierra firme, corresponde a la iniciativa criolla, en especial de religiosos, quienes acusando la necesidad de proteger su integridad física y reducir pueblos a misión.
La Villa de Upata nació con una potencial vocación agrícola y pecuaria. Fundada sobre el esplendoroso y luminoso valle del Yocoima, la corona española afincada en el trabajo de frailes y conquistadores parió una aristocrática comarca que andando en el tiempo se entronizó a profundidad en la Guayana venezolana creciendo aferrada a la tierra con la tenacidad de árboles para no decaer jamás a pesar de todas las dificultades por donde transitó para mantenerse viva en el concierto de los demás pueblos con los cuales nació.
Upata, sabor a tierra mojada donde los hombres moldean el futuro del pueblo con sus ingeniosas manos las arcillas que brotan del surco fértil de la tierra donde hombres, casas y comercios estaban alineados perfectamente en esta aristocrática villa donde quedó bien impresa la huella civilizadora del fraile español que la diseñó a su imagen y semejanza. Aldea rural que un día salpicó la conciencia de los forasteros que traspasaron sus predios.
Casco colonial desaparece
En tal sentido historiadores como Francisco Hernández, es importante elaborar leyes desde el Concejo Municipal que proteja los bienes patrimoniales, Upata perdió su identidad, sus casas coloniales han desaparecidos por la inversión hecha tanto de la municipalidad con el sector privado permitiendo la construcción de edificaciones.
En lo referente a los espacios turísticos y recreativos no se ha dado el empuje, monumentos como La Virgen de la Paz, piedra Santa María, asimismo el cerro El Corozo casi desaparecido su pulmón vegetal por la deforestación de árboles, ante la necesidad de no contar con servicios como gas, pobladores han talado el 90 % del cerro madera usada para preparar fogón.
A juicio de Luis Reyes, cultor involucrado con el teatro de muñecos, el Municipio desde hace mucho tiempo carece de planes culturales orientados al fortalecimiento artístico de jóvenes y niños, muchos de los cuales buscan alternativas de formación en centros privados.
En lo económico, Upata no ha tenido avances, el progreso es solo para una minoría y la mayoría de los pobladores continua viviendo estancada en el tiempo. Sin fuentes de empleos en los últimos años se ha visto desde Upata el éxodo masivo de personas hacia las zonas mineras.
