Muchos problemas sin ser
atendidos por los gobernantes de turnos
Upata. – Hoy
la Villa del Yocoima está arribando a sus 259 aniversarios, ciudad que crece
cada día vertiginosamente, con una población que sobrepasa los 200 mil
habitantes, la cual fue fundada un 07 de julio de 1762, y hoy los pobladores
esperan por parte de los entes gubernamentales, que den respuestas a los
innumerables problemas y que trabajen en beneficio de la colectividad.
En este aniversario, los
piarenses manifestaron que no tienen nada que celebrar, porque las debilidades
los agobian cada día, donde el problema de agua, alumbrado público, asfaltado,
basura, desempleo, inseguridad y falta de proyectos habitacionales, son parte
de las denuncias que realizan diariamente y no son escuchados por las
autoridades locales.
Carlos Gutiérrez,
habitante en el municipio señaló, “todos los servicios básicos son precarios en
este municipio, una de las dificultades que nos están afectando es la ausencia
de agua potable, donde tenemos que ingeniárnosla para poder obtener el
beneficio, nuestros hijos son los más perjudicados porque le damos agua que no
es tratada para el consumo”.
Municipio desatendido
El gas doméstico, no
llega a muchos sectores de la población, por tanto, existen miles de familias
que han sido perjudicadas por el humo al cocinar en fogón, aunado a esto, las
calles de las comunidades están en un 90% deplorables, el aseo urbano sólo
cubre las rutas del casco central y algunas comunidades cercanas, el
desbordamiento de aguas negras, ha sido otro “dolor de cabeza”, para los
piarenses.
Mientras que el profesor
Francisco Hernández, cultor resaltó, “se han perdido muchos espacios de
esparcimientos en nuestra querida Upata, asimismo en lo histórico se refiere,
donde el descontrol de permisologia para derribar casas coloniales ubicadas en
el centro del pueblo, al parecer ha sido algo común, ya quedamos sin historia
de aquellas casas coloniales de techos rojos”.
Mencionó el cultor, que
el Cerro El Corozo, está a punto de desaparecer por la tala, esto bajo la
mirada indolente de las autoridades, “el casco histórico se ha perdido y la
parte colonial también de una forma irracional, necesitamos que los gobernantes
de turnos trabajen en beneficio de Upata y su población”.
